¿Qué es un producto digital? Y también definimos lo que no es 🙃

Un producto es un bien que puede venderse, es decir que, previamente, se le ha asignado cierto valor de mercado. En el caso del producto digital este concepto se aplica de igual manera, aunque presenta algunas características particulares. Si bien estamos de acuerdo con que puede venderse y también en que tiene un valor económico, lo cierto es que, podríamos definirlo como una solución digital o creación intangible, y por el otro, el proceso de venta dista bastante del proceso de los productos tradicionales.

Una primera aproximación al concepto nos dice que un producto digital es aquel que agrega valor a un determinado grupo de usuarios a través de una solución digital. 

Este producto es creado por una persona o empresa con el fin de solucionar un problema o generar un beneficio, y ese beneficio o valor es capitalizado por su creador o dueño a través de diferentes formas, tales como la generación de ventas, la eficientización de un proceso, la mejora de la comunicación de los equipos, entre otras.

Uber, uno de los productos digitales más famosos de la historia, fue creado para simplificar la movilidad y traslado de las personas en las grandes ciudades. Cuenta con diferentes tipos de usuarios que perciben valor en el uso de la aplicación: por un lado, los conductores que usan la solución generan dinero trasladando a personas. Por otro lado, los ciudadanos en general, que son quienes eligen la aplicación para ser trasladados, se benefician de las ventajas derivadas de viajes más económicos, incluso viajes compartidos. Ese valor es capitalizado a través de comisiones cobradas por Uber, tomando como base la transacción generada entre conductores y pasajeros. De esta manera, Uber ha logrado establecerse a través de este modelo de negocios.

Otro ejemplo podría ser un sistema contable empresarial. Se trata de un producto que da una solución digital a diversos grupos de usuarios; contadores y personal administrativo de la empresa que utilizan el producto para mantener ordenadas las cuentas, los impuestos, los balances, el registro de los movimientos importantes de la organización, etc.

¿Los clientes son a su vez los usuarios de un producto digital?

En principio diré sí y no. En ciertos productos ambas características pueden fundirse en la misma persona, como por ejemplo, un usuario que compra a través de Mercado Libre es, a su vez, un cliente. Sin embargo, existen casos, como los diarios digitales, en los cuales los usuarios son los lectores, mientras que sus clientes son los anunciantes que pagan por los espacios destinados a las pautas publicitarias. Es decir, que quienes usan el servicio no necesariamente tienen que ser aquellos que generan la compensación económica que tracciona y logra que el modelo de negocio funcione.

Y la transformación digital, ¿tiene relación con el desarrollo de productos digitales?

Pareciera que hablar de transformación digital se ha vuelto un cliché sobre el cual instalar debates y conversaciones sociales que generen tendencia. Pese a ello, y más allá de su repetición en el mundo corporativo, es un concepto directamente asociado a los productos digitales.

Uno de los grandes desafíos que tienen las empresas es hacer que el negocio evolucione, siendo conscientes del hecho de tener que lograr esa evolución a través del uso y la asistencia de la tecnología, creando productos digitales nuevos o logrando la mejora de los ya existentes. 

Por lo tanto, es el mismo proceso de transformación digital el que demanda la creación de productos digitales o la adaptación a uno ya presente que tengan la capacidad de generar una evolución en la estructura actual de la organización, o en la forma en que la cultura organizacional dirige y cumple con sus procesos imperantes hasta el momento. Es la misma dinámica del mercado que exige a las empresas montarse a las tendencias de una sociedad global que crece juntamente con el desarrollo de la tecnología en un proceso de retroalimentación continua. De eso se trata la transformación digital, y es por eso que llegó para quedarse.

En un informe reciente de EY se entrevistaron alrededor de 1.000 ejecutivos de empresas acerca de este tema. El 62% coincidió en que sus organizaciones deben transformar radicalmente sus operaciones en los próximos dos años, y que para eso se hace necesario el uso de la tecnología. Sin embargo, solo el 9% afirmó tener una estrategia clara y una buena ejecución técnica. En este sentido, si bien el porcentaje de ejecutivos conscientes de la necesidad de mutar presenta un número elevado, no corre la misma suerte la implementación, la bajada a tierra de una transformación que absorba el impacto de una nueva era. 

Sobre este y los próximos artículos:

Este es el primero de una serie de artículos sobre productos digitales y todo su contexto asociado. Simples definiciones que serán el punto de partida hacia un camino de aprendizaje continuo y conjunto. 

Estrategia de productos tecnológicos asociada al negocio, escasez global de talento IT y estructura ideal de una compañía para desarrollar productos digitales serán algunos de los próximos temas.

Si llegaste hasta acá y te pareció interesante, espero tu feedback.

¡Muchas gracias por leerme!